Los aficionados disfrutan del día de convivencia a pesar del frío y el viento.

El tiempo no acompañó en esta ocasión a los entusiastas aficionados a la pesca que se dieron cita en el lago Monte de Jabares. De todas formas, el viento, la lluvia y el frío matinal no doblegaron el ánimo de los sufridos pescadores, entre ellos varios niños. La climatología dio una tregua por la tarde y esto permitió los mejores lances.

A pesar de ello fueron abundantes las capturas y, al medio día, no faltaron los chorizos a la sidra y la fabada, cocinados «in situ» para combatir el frío. Esta jornada de convivencia no cierra todavía el ciclo de actividades que para 2016 había programado la junta directiva, pues el día 17 de diciembre está prevista la comida de Navidad.

Pescaleón ha sido, desde su fundación, una sociedad de pescadores muy especial, pues no participa como la gran mayoría de asociaciones en competiciones ya que sus objetivos son bien diferentes. El amor por los ríos y la naturaleza, la defensa de la pesca con sus distintas artes y técnicas que van desde las más tradicionales a la mosca seca y la difusión y formación entre los niños y personas con limitaciones físicas, siempre han estado entre sus prioridades. Mantienen además un foro muy activo en su página web, en la que también se encuentra la información más diversa siempre relacionada con el mundo de la pesca.

Estaba prevista, en esta jornada, la visita de Pablo Castro Pinos y Manuel Álvarez Iglesias, los dos componentes leoneses del equipo nacional campeón del mundo. Ineludibles motivos familiares impidieron la presencia de Castro Pinos, pero no la de su compañero que compartió sus experiencias mundialistas y obsequió con una caña y la gorra que utilizó en el mencionado mundial de salmónidos en California a los dos socios más entusiastas, pese a su movilidad reducida.